El año está a punto de terminar y el 2023 ha sido positivo para la industria de la construcción, gracias a la integración de materiales innovadores en la edificación de viviendas. La sostenibilidad ha sido un foco importante durante este tiempo. ¿Persistirá esta tendencia en 2024?
El sector de la construcción y la arquitectura se ajusta continuamente a los cambios y demandas de los clientes. Las tendencias guían a los profesionales en la realización de los proyectos solicitados, marcando el rumbo a seguir cada año.
Las tendencias van y vuelven, pero muchas permanecen. ¿Qué tipo de edificaciones nos esperan el año que viene?
Las casas pasivas o Passivhaus
Las casas pasivas, o Passivhaus en alemán, son un estándar de construcción de edificios altamente eficientes en términos energéticos. El concepto se originó en Alemania en la década de 1990 y se ha extendido por todo el mundo debido a su enfoque en reducir significativamente la necesidad de calefacción y refrigeración, manteniendo un ambiente interior cómodo y saludable. Todo apunta a que en el 2024 también van a ser una de las viviendas más solicitadas por los clientes.
Las casas pasivas se diseñan y construyen siguiendo ciertos principios clave:
- Aislamiento excelente: Utilizan aislamientos de alta calidad en paredes, techos, suelos y ventanas para minimizar la pérdida de calor en invierno y el ingreso de calor en verano.
- Estanqueidad al aire: Se enfocan en reducir al máximo las filtraciones de aire no deseadas, lo que ayuda a conservar la energía y mantener una temperatura interior constante.
- Ventilación controlada con recuperación de calor: Utilizan sistemas de ventilación mecánica con recuperación de calor para garantizar un suministro constante de aire fresco sin perder energía en el proceso.
- Ventanas y puertas de alta calidad: Emplean ventanas y puertas con vidrios de triple o doble panel y marcos altamente eficientes para reducir las pérdidas térmicas.
- Orientación y diseño pasivo: Aprovechan la orientación solar y el diseño inteligente para maximizar el uso de la luz natural y el calor solar durante el invierno, mientras se minimiza la exposición al calor en verano.
Estas casas pueden lograr una reducción significativa en el consumo de energía en comparación con las construcciones convencionales, a veces hasta un 90% menos de energía para calefacción y refrigeración.
Aquí te dejamos un enlace de uno de los ficheros de detalles constructivos DWG para la elaboración de casas Passivhaus.
Más presencia de la tecnología en los hogares
La tecnología seguirá transformando el diseño y la funcionalidad de las casas, y en 2024 veremos un énfasis aún mayor en varias áreas:
Domótica avanzada
La integración de sistemas domóticos será más común, permitiendo el control remoto de luces, temperatura, sistemas de seguridad y electrodomésticos a través de dispositivos móviles. Los hogares serán más inteligentes y personalizables, adaptándose a las preferencias individuales de los residentes.
Sostenibilidad y eficiencia energética inteligente
Se esperan avances en sistemas de gestión energética que optimicen el consumo eléctrico, con la integración de paneles solares, almacenamiento de energía y sistemas de gestión inteligente para reducir el impacto ambiental y los costos a largo plazo.
Realidad virtual y aumentada en el diseño y venta de viviendas
Se espera una mayor utilización de la realidad virtual y aumentada en la visualización de proyectos arquitectónicos. Los clientes podrán experimentar virtualmente sus futuras casas antes de la construcción y los agentes inmobiliarios podrán mostrar propiedades de manera más inmersiva.
Seguridad avanzada
El uso de tecnologías de seguridad como reconocimiento facial, cerraduras inteligentes y sistemas de vigilancia conectados se volverá más común para garantizar la protección de los hogares y sus habitantes.
Construcciones más sostenibles
La búsqueda de materiales de construcción ecoamigables y de bajo impacto ambiental seguirá siendo siendo una prioridad a la hora de construir edificios en 2024. Se están desarrollando y utilizando más materiales reciclados, como madera, vidrio, acero reciclado y concreto ecoeficiente. Además, se están explorando alternativas como el bambú y nuevos compuestos orgánicos.
La demanda de certificaciones de construcción sostenible, como LEED, BREEAM o WELL, está en aumento. Estos estándares garantizan que los edificios cumplan con ciertos criterios de sostenibilidad, desde la eficiencia energética hasta la calidad del aire interior y el bienestar de los inquilinos.
Además, los arquitectos seguirán incorporando principios de diseño bioclimático para aprovechar la luz natural, la ventilación cruzada y el aprovechamiento de la energía solar. Los edificios se diseñan considerando la orientación, la forma y el uso inteligente de los espacios para reducir la demanda de energía.
Estas son 3 de las tendencias que van a seguir manteniéndose en 2024. ¿Qué os parecen?