Todos sabemos qué es un plan de seguridad y salud, pues se requiere para la mayoría de las intervenciones de cierta envergadura en obra. Sin embargo, tal vez no seamos conscientes de los beneficios reales que nos aporta su cumplimiento a la hora de llevar a cabo instalaciones fotovoltaicas:
- Mayor Productividad y calidad de lo ejecutado.
- Reduce accidentes y costos asociados a la atención médica.
- Muestra compromiso con la responsabilidad social corporativa, mejorando la reputación de la empresa, brindando ventajas competitivas.
- Cumple con regulaciones y evita problemas legales y evita multas y costos de accidentes a largo plazo.
- Crea un ambiente laboral saludable y reduce la rotación de personal.
Resumiendo, independientemente de los tipos de instalaciones fotovoltaicas a que se refiera, el Plan de Seguridad y Salud beneficia a los trabajadores y mejora la eficiencia, reduciendo costos y optimizando proyectos fotovoltaicos.
Vista su importancia, en el siguiente artículo profundizaremos en las condiciones específicas que se deben dar para su cumpliento en obra. Además, si tienes entre manos un proyecto similar, tenemos a tu disposición ejemplos reales y ejecutados de planes de seguridad y salud de instalaciones fotovoltaicas, así como un servicio de documentación específico para este tipo de actuaciones.
Pero primero, una breve aclaración para evitar confusiones:veamos la diferencia entre en plan de seguridad y salud General y uno de Obra.
Comparativa: Plan de Seguridad y Salud en Obra vs. Plan de Salud y Seguridad General.
El Plan de Seguridad y Salud en el Trabajo en Obra y el Plan de Seguridad y Salud en General son dos documentos relacionados con la gestión de la seguridad y la salud en el entorno laboral, pero difieren en sus enfoques y alcances:
Plan de Seguridad y Salud en el Trabajo en Obra:
- Se centra en las actividades y riesgos específicos asociados a una obra de construcción o proyecto en particular.
- Suele tener un ámbito temporal limitado que coincide con la duración de la obra o proyecto.
- Incluye detalles específicos sobre la obra, como ubicación, plazos, tareas a realizar y recursos necesarios.
- Se concentra en la evaluación de riesgos particulares asociados a la obra, como caídas desde alturas, riesgos eléctricos, manipulación de maquinaria pesada, etc.
- Proporciona medidas preventivas y procedimientos específicos para abordar los riesgos identificados en la obra en cuestión.
- Debe cumplir con las regulaciones y los requisitos específicos de seguridad y salud laboral aplicables a la construcción.
Plan de Seguridad y Salud en General:
- Abarca las políticas y procedimientos generales relacionados con la seguridad y la salud en el lugar de trabajo, sin centrarse en un proyecto específico.
- Tiene un ámbito temporal más amplio y es aplicable a la totalidad de la empresa o lugar de trabajo durante su existencia.
- Establece políticas y normativas generales que rigen la seguridad y salud en el trabajo para toda la organización.
- Puede incluir evaluaciones de riesgos generales que se aplican a diferentes áreas o actividades laborales de la empresa.
- Proporciona procedimientos estándar para situaciones comunes de seguridad y salud laboral, como primeros auxilios, evacuación de emergencia, uso de EPP, etc.
- Se asegura de que la empresa cumpla con todas las regulaciones y leyes aplicables relacionadas con la seguridad y la salud en el trabajo.
¿Cómo cumplir con las Normativas de Seguridad en Instalaciones Fotovoltaicas ?
Como ya sabes, existe un marco normativo que establece la obligación de que las empresas instaladoras desarrollen un plan de seguridad y salud para sus proyectos.
- La Ley 31/1995, promulgada el 8 de noviembre, conocida como la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. Esta legislación es la encargada de incorporar en la legislación española la Directiva 89/391/CEE de la Unión Europea, cuyo principal enfoque radica en la implementación de medidas destinadas a reducir los accidentes laborales y mejorar las condiciones laborales del personal.
Otros textos legales que le afectan son:
- Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (Real Decreto 842/2002, de 2 de agosto).
- Reglamento de Seguridad e Higiene en la Industria de la Construcción (Real Decreto 1627/1997, de 24 de octubre).
- Real Decreto 39/1997, de 17 de enero, que aprueba el Reglamento de los Servicios de Prevención.
- Homologación de Equipos de Protección Personal de los Trabajadores (NTP 48).
Los puntos que incluye un Plan de Seguridad y Salud para Instalaciones fotovoltaicas no difieren mucho de los de cualquier tipo de obra:
- Identificación de riesgos: Reconoce los posibles peligros.
- Equipo de protección personal (EPP): Capacita y provee EPP.
- Planificación y organización: Plan detallado y coordinación de tareas.
- Protección contra incendios: Medidas antiincendios y sistemas de extinción.
- Seguridad eléctrica: Procedimientos para evitar choques y cortocircuitos.
- Acceso seguro al área de trabajo: Protección contra caídas y seguridad en escaleras.
- Señalización y control de acceso: Advertencias y acceso autorizado.
- Procedimientos de emergencia: Protocolos de respuesta y equipos de primeros auxilios.
- Documentación y registro: Registro de inspecciones, capacitación e incidentes.
- Supervisión y revisión continua: Supervisor de seguridad y revisiones periódicas.
- Cumplimiento legal y normativo: Conformidad con regulaciones locales, estatales y nacionales.
Veamos ahora las condiciones específicas que debemos cumplir.
Identificación de riesgos
En primer lugar, deberemos evaluar los riesgos, como peligros eléctricos, caídas, exposición a productos químicos y condiciones climáticas adversas. Los más comunes son:
- Riesgo de lesiones oculares debido a la entrada de partículas, lo que podría llevar a casos de conjuntivitis o visión afectada debido a exposiciones no protegidas, como al arco de soldadura.
- Riesgo de quemaduras al entrar en contacto con superficies calientes.
- Peligro de heridas causadas por el uso inapropiado de herramientas.
- Posible contaminación acústica y ambiental debido a la dispersión de polvo en el ambiente laboral.
- Caída de objetos o herramientas que pueden impactar a los trabajadores o a personas ajenas al lugar de trabajo.
- Lesiones en las manos y pies debido a un manejo inadecuado de materiales y herramientas.
- Riesgo de ser golpeado o atropellado por vehículos, como montacargas, si es relevante para la obra.
- Riesgos más graves, como las caídas desde alturas, ya sea desde plataformas, techos o cubiertas.
- Peligro de atrapamiento de un trabajador entre componentes de la instalación o elementos arquitectónicos.
- Posibilidad de accidentes relacionados con la manipulación y transporte de objetos pesados por parte de los trabajadores, lo que podría resultar en caídas de objetos.
- Desprendimiento de materiales debido a una sujeción deficiente o cargas excesivas en los equipos de elevación.
- Cortes con objetos afilados o punzantes en el lugar de trabajo.
- Riesgo de quedar atrapado en máquinas que podrían volcar.
- Exposición a descargas eléctricas debido a la gestión de líneas eléctricas o la red eléctrica convencional
- Además, no olvides analizar los riesgos específicos del lugar, como topografía y cables subterráneos.
Medidas generales de seguridad
Se trata de medidas preventivas esenciales que se adaptan a las características específicas del entorno de trabajo, ya sea en una residencia, un edificio de viviendas o una nave industrial. Aquí te listamos las que no puedes dejar de considerar:
- En todos los casos, la instalación de equipos eléctricos debe ser realizada exclusivamente por personal altamente calificado y con experiencia. Del mismo modo, aquellos encargados de fijar los soportes para los paneles solares o llevar a cabo trabajos de albañilería adicionales para garantizar la seguridad de estas estructuras deben estar debidamente capacitados.
- Para acceder a techos y cubiertas, se deben utilizar andamios metálicos o escaleras de mano.
- Se deben instalar sistemas de líneas de vida y proporcionarlos a todos los operarios que trabajen en techos y cubiertas. Estos sistemas deben contar con un medio de sujeción robusto y probado.
- En situaciones que requieran acceso a lugares elevados, se deben utilizar escaleras de mano de tipo tijera que tengan cintas antideslizantes en los escalones y una cadena que limite la apertura. En ningún caso se deben utilizar escaleras de mano en lugar de andamios.
- Es imperativo mantener las áreas de tránsito limpias y libres de escombros y desechos.
- Si es necesario trabajar durante la noche, se deben utilizar luces portátiles con portalámparas estancos que estén equipados con mangos aislantes y rejas de protección para las bombillas.
- Está terminantemente prohibido realizar conexiones de conductores en cuadros provisionales del proyecto que no cuenten con enchufes macho-hembra.
- Además, es una obligación el uso de herramientas que estén protegidas con materiales aislantes resistentes para evitar cualquier contacto eléctrico accidental. Cualquier herramienta que presente desgaste en su aislamiento debe ser retirada de inmediato.
Equipo de protección personal (EPP)
Deberás especificar el EPP necesario, como cascos, gafas, guantes, calzado y arneses para trabajos en altura. Concretando:
- El casco es de uso obligatorio para todos los trabajadores y debe cumplir con la Resolución de la Dirección General de Trabajo (DGT) del 14/12/74. Debe estar clasificado como «N», apto para trabajos con riesgo eléctrico hasta 1,000 V y pesar menos de 450 gramos. Los cascos que hayan sufrido impactos fuertes o tengan más de 10 años, sin importar su uso, deben ser reemplazados.
- El calzado de seguridad debe ser homologado según la Resolución de la DGT del 31/01/08. Debe ser de Clase III, con puntera y plantilla de protección, y pesar menos de 800 gramos. En entornos húmedos, se requieren botas de goma, de Clase «E», según la Norma Técnica Reglamentaria MT 27 (Resolución de la DGT del 03/12/81).
- Los guantes son esenciales para proteger las manos. Para trabajos con riesgo de electrocución, deben cumplir la Norma Técnica Reglamentaria MT 4 (Resolución DGT del 28/07/75). Los guantes de algodón son adecuados para trabajos livianos, los de malla metálica son para materiales cortantes, y los de cuero son para la manipulación general de materiales.
- Cinturones de seguridad para trabajos en altura, con clases A, B o C según las Normas Técnicas Reglamentarias MT 13, 21 y 22.
- Dispositivos contra caídas para operaciones de elevación y descenso, regulados por la Norma Técnica Reglamentaria MT 28 (Resolución DGT del 25/09/82).
- Protectores auditivos en entornos ruidosos, como orejeras, tapones o cascos contra el ruido de más de 80 dB.
- Protectores de vista, como gafas de seguridad homologadas según la NTR-MT 16, y pantallas de soldador que cumplen con las especificaciones de las NTR-MT 3, 18 y 19.
Sabemos que son muchas, léelas atentamente pues con total seguridad, a la hora de llevar a cabo dicho plan, deberás considerar las medidas que hemos listado.
Como siempre, en Ficherotecnia queremos servirte en tu ejercicio como técnico de forma que puedas adelantarte a las dificultades del día a día de la profesión.
Saludos y hasta la próxima entrega.